Resumen:

Esta ponencia se deriva de los resultados del proyecto de investigación «Reconstrucción de la memoria histórica de la Asociación Campesina del valle del río Cimitarra ACVC, con enfoque de género», que contó con financiación por parte de Colciencias.  Su objetivo fue reconstruir la memoria histórica de la ACVC con enfoque de género, promoviendo el acceso de la organización social a la reparación simbólica y reconociendo sus expectativas y potencialidades en la construcción de paz en un escenario de posacuerdo en Colombia. Para lograr este propósito, se empleó una aproximación inspirada en las herramientas desarrolladas por el Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH), que se caracterizan por su alto nivel participativo y por un énfasis en la dignificación de las víctimas como individuos, comunidades y organizaciones en proceso de convertirse en sujeto de reparación colectiva.La ACVC es una organización social no gubernamental fundada en 1996. Está integrada mayoritariamente por campesinos que han colonizado el valle del río Cimitarra, una región ubicada en el sur de la región del Magdalena Medio colombiano. Muchos de ellos han llegado a esta región debido a que han sido desplazados de otras zonas del país por cuenta del conflicto armado. Lo anterior los ha llevado a orientar la acción de la ACVC hacia la construcción del arraigo, la defensa del territorio y la permanencia en él. Tal cosa supone, de una u otra forma, resistir a nuevos desplazamientos y a otras formas de violencia. Dicha resistencia colectiva y organizada se articula con 181 juntas de acción comunal que componen sus tres seccionales: nordeste antioqueño, medio cimitarra y sur de Bolívar. En años recientes, consciente como es de ser un actor histórico, la ACVC ha empezado a promover acciones tendientes a la reparación simbólica de los daños colectivos que ha experimentado durante el conflicto. Además, persigue decididamente la construcción de paz en Colombia. La reconstrucción de la memoria histórica de esta organización campesina ha requerido un proceso riguroso, llevado a cabo a lo largo de alrededor de 24 meses. El primer paso consistió en una revisión de la bibliografía colombiana acerca de los procesos de memoria histórica en el país, con especial interés en los trabajos realizados por el CNMH. A su vez, se indagó acerca del conflicto armado colombiano, buscando establecer categorías deductivas con las que se desarrollaría el proceso reconstrucción de memoria. La revisión bibliográfica y la reflexión en el interior del equipo llevó a proponer cinco grandes categorías: 1) Antecedentes o contexto sociohistórico del surgimiento y desarrollo de la ACVC (1970-1996); 2) Repertorios de violencia, daños y reparación experimentados entre 1996 y 2018; 3) Acciones de resistencia realizados por la organización (1996-2018); 4) Enfoque de género y formas de entender el rol de la mujer en la organización campesina, y 5) Expectativas y potencialidades frente a la implementación del Acuerdo Final de Paz en el escenario del actual posacuerdo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC-EP).Una vez superada la etapa de documentación, el segundo paso de la investigación consistió en encuentros con líderes y lideresas de la ACVC orientados a socializar el proyecto, así como a establecer los objetivos y alcances del proceso de construcción de memoria histórica. Como resultado, se establecieron herramientas y técnicas de recolección de información que incluyeron entrevistas individuales y colectivas, talleres de memoria con hombres y mujeres víctimas de violencia, y observación participante en eventos desarrollados por la ACVC durante la ejecución del proyecto. El trabajo de campo fue el tercer paso del proceso, supuso para los investigadores el desplazamiento a diferentes lugares en los que hace presencia la organización, para contactar directamente con sus miembros. En total se llevaron a cabo 6 talleres de memoria histórica colectiva: uno en cada seccional de trabajo de la ACVC, un taller con los fundadores de la asociación en Barrancabermeja, y dos talleres con mujeres lideresas de la ACVC en Cantagallo y San Lorenzo. En los encuentros con los campesinos y campesinas de la ACVC se procuró el uso de herramientas que facilitaran la construcción de un sentido propio y auténtico del pasado. En este sentido, fueron útiles técnicas como las líneas de tiempo, la cartografía social, el análisis prospectivo y el dibujo, entre otros. En estos espacios se pudo realizar un total de 36 entrevistas individuales a 23 líderes y 13 lideresas de la ACVC, así como dos entrevistas colectivas. El cuarto paso del proceso: el análisis de los datos. Para tal fin se transcribieron todas las grabaciones realizadas, y se procedió a su codificación acorde con los ejes de análisis. El tratamiento de la información se realizó con el programa Atlas Ti ® versión 6.2. Dada la naturaleza del proyecto, los audios y sus transcripciones se anonimizaron y protegieron siguiendo cuidadosas medidas de seguridad. Dada la vastedad de los resultados de la investigación, esta ponencia se centrará en presentar el proceso histórico mediante el cual la ACVC viene incorporando discusiones en torno al género, y, en específico, cómo esta organización asume el feminismo campesino y popular como apuesta para lograr la igualdad de derechos entre hombres y mujeres. Interesa evidenciar las principales dificultades, contradicciones y dilemas que enfrentan los hombres y las mujeres que han decidido poner en debate las cuestiones de género en la región y en el interior de la asociación. Asimismo, a través de relatos de vida y líneas de tiempo rescatan el papel de las mujeres lideresas en la construcción y consolidación del proyecto organizativo de la ACVC.

Resumen:

A violência praticada contra as mulheres é um fato histórico, que se ancora nas desigualdades que caracterizam as relações de gênero nas sociedades patriarcais. Fenômeno complexo e multidimensional, a violência contra mulheres e meninas é um tipo de violência de gênero, que expressa a relação de poder e dominação do masculino em relação ao feminino. A violência contra as mulheres entrou em a pauta e passou a fazer parte das agendas públicas de governos, por todo mundo, devido às lutas feministas. No Brasil, a Lei nº 11.340 de 2006, conhecida como Lei Maria da Penha (LMP), é reflexo dessas mobilizações e trouxe grandes avanços para o combate à violência. Além do Estado reconhecer as violências sofridas como crimes, a Lei aborda a violência, como fenômeno complexo, que perpassa diferentes esferas do social, e que deve ser enfrentada, articuladamente, pelas políticas públicas de saúde, educação, assistência social, trabalho e segurança pública e justiça. (BRASIL, 2006). Foi esse contexto que serviu de leitmotiv para a criação de Projeto de Extensão Universitária, que, desde 2013, oferece atendimento multidisciplinar psicossocial e jurídico às mulheres em situação de violência doméstica e familiar, residentes na Região Administrativa de Ceilândia, no Distrito Federal, “numa perspectiva feminista interdisciplinar, bem como de assessoria jurídico popular”. Essas atividades, historicamente, se realizaram aos sábados, entre 09 e 13 horas, na sede do Núcleo de Práticas Jurídicas, localizado na cidade. As reuniões de equipe bem como os atendimentos individuais e grupais às mulheres assessoradas para orientação jurídica e/ou psicológica, ocorrendo em distintas periodicidades, em virtude das necessidades, demandas e possibilidades. A pandemia de Covid-19 impactou diretamente essa dinâmica e as atividades passaram a ser realizadas por meio remoto. Neste texto se apresenta algumas reflexões sobre o enfrentamento da violência doméstica e familiar contra mulheres na região de Ceilândia-DF, a partir de nossa participação no referido projeto, de nome  “Maria da Penha - Atenção e Proteção a mulheres em situação de violência doméstica e familiar” (PMP), no período de outubro de 2020 a julho de 2021. Pesquisadoras da área de sociologia e de serviço social nos somamos ao PMP, acompanhando as reuniões e atividades do grupo junto às mulheres em situação de violência doméstica e/ou familiar. Nossa perspectiva ao participarmos das atividades foi identificar os determinantes sociais que conformam a experiência de violência das mulheres assistidas; determinantes estes que se revelam ao campo do judiciário, nos atendimentos e impulsionam as assessoradas a demandarem a justiça e, eventualmente, desistiram dessas demandas. Entre estes determinantes, nosso foco se centrou no acesso aos serviços socioassistenciais, de saúde e de justiça, as redes familiares de apoio e a inserção em coletivos e grupos comunitários e/ou religiosos, assim como a ausência ou falta de tais redes e relações. A premissa é que a inserção, ou não, em programas e políticas sociais, a participação, ou não, em redes de parentesco, de vizinhança, redes associativas ou de sociabilidade (tais como igrejas, grupos comunitários, de mulheres dentre outras) se traduzem no acesso às informações e recursos, que podem contribuir objetivamente para a ruptura e o enfrentamento das situações de violência.A Ceilândia é uma das primeiras cidades do Distrito Federal. Criada em 1971, no bojo da Campanha de Erradicação das Favelas - CEI, de viés higienista, realizada a fim de retirar trabalhadores, que moravam no centro da capital, é atualmente a maior região administrativa do DF, com cerca de 489.341 habitantes, equivalendo a cerca de 15% da população total do DF.  Localizada a 26 km da zona central de Brasília,  a cidade possui uma gama expressiva de serviços ofertados por instituições públicas e privadas, com numerosas organizações do terceiro setor e entidades de defesa de direitos, criadas pela sociedade civil organizada.   Dentre os serviços socioassistenciais destaca-se o Centro de Referência em Assistência Social (CRAS); Centro de Referência Especializado em Assistência Social (CREAS); Centro Especializada de Atendimento à Mulher (CEAM); Casa da Mulher Brasileira (CMB); Centro de Atenção Psicossocial (CAPS), CAPS - Álcool e Outras Drogas. Por ser a região administrativa que mais registrou casos de violência doméstica, nos últimos anos, de acordo com dados coletados da Secretaria de Segurança Pública do Distrito Federal, a cidade foi escolhida para receber a segunda delegacia especializada para atendimento às mulheres, do Distrito Federal, em 2020. A quantidade significativa de equipamentos para ações  e serviços de prevenção e assistência, não se mostra, entretanto, suficiente às necessidades da população. Situação que se revela dramática para as mulheres inseridas em situação  de violência. Esse cenário que remete ao avanço do neoliberalismo, com a consequente redução dos investimentos públicos em políticas sociais, agravou-se sobremaneira com o surgimento da pandemia de Covid-19. Segundo o Fórum Brasileiro de Segurança Pública, entre março e abril de 2020, ocorreu um aumento de 22,2% de feminicídio no Brasil, em relação ao mesmo período, do ano anterior. A mesma pesquisa aponta, também, que durante a pandemia, as mulheres tem encontrado maior dificuldade para denunciar as violências sofridas. Isso se reflete na redução nas denúncias e nos registros de boletim de ocorrência, com a consequente produção de estatísticas oficiais que não condizem com a realidade.Durante o período de participação nas atividades foi possível observar alguns desafios sofridos pelas mulheres, devido a pandemia e ao isolamento social, que amplificam a violência doméstica. Dentre eles se destacaram a falta de acesso à tecnologia (internet e telefone, especialmente), falta de atendimento presencial no CRAS, superlotação da rede básica de saúde, falta de privacidade em casa e,  convívio ininterrupto com o agressor, entre outros. A insufiência de serviços públicos ser faz notar ainda nas demandas encaminhadas ao PMP, que dificilmente podem ser acolhidas em sua integalidade, haja vista que, a condição de atividade de extensão do Projeto lhe imprime a dinâmica característica da universidade, com rotatividade de estudantes extensionistas e funcionamento conforme o calendário acadêmico.

Resumen:

Resumen Ponencia “Mis hijos los crio yo”: La radicalización del fundamentalismo cristiano y su ataque al Trabajo Social en Puerto RicoPor: Contreras Ortiz, JessicaRosario Rivera, NélidaSerrano González, Yalitza N.  IntroducciónParecería que el “Centro Rojo” y el Estado de “Gilead” del Cuento de la Criada trascienden el imaginario de Atwood y la serie televisiva.  Esto, cuando vivimos en tiempos en los cuales constantemente se amenazan, bajo preceptos religiosos, los derechos de las mujeres y de las comunidades de identidades u orientaciones sexuales diversas.  Puerto Rico, así como muchos países de la región, está experimentando un recrudecimiento de los discursos y accionares políticos del fundamentalismo cristiano.  En los pasados años, este sector ha intensificado sus acciones organizadas para oponerse a un currículo con perspectiva de género bajo el lema “mis hijos los crío yo”, trastocar el derecho al aborto reconocido y regulado en el país, crear organizaciones políticas de base religiosas e incluso un nuevo partido político abiertamente conservador, con funcionarias electas.  Incidencia del Trabajo Social y el impacto al CPTSPRAnte esta coyuntura, el Trabajo Social tiene una gran relevancia y aporte al debate y la política pública en el país.  Igualmente, esto pone a la comunidad profesional en posición de estar en constante estudio de las repercusiones para la formación y la práctica en la carrera.  En Puerto Rico, el Colegio de Profesionales del Trabajo Social (CPTSPR), junto a organizaciones feministas y en defensa de los derechos humanos, ha estado presente en la formulación de política pública, en los debates públicos y campañas educativas.  Esto, fundamentado desde el proyecto profesional ético-político que la organización ha construido desde el año 2008. En esta exposición, nos enfocaremos en tres asuntos principales que han sido discutidos en el país y para los cuales el CPTSPR ha estado presente.  Primeramente, la propuesta de un currículo con perspectiva de género.   El movimiento feminista ha propuesto que en las escuelas públicas se incorpore la perspectiva de género como política pública transversal a todo el modelo de enseñanza.  Esta propuesta surge en el reconocimiento de la violencia por razón de género que experimentan las personas feminizadas.  De ahí, que un proyecto de prevención desde edades escolares va siendo una apuesta teórico-metodológica relevante.  Recientemente, se ha comenzado con el diseño del currículo provocando que los grupos en oposición aumenten su activismo haciendo alusión a la “ideología de género” y promoviendo la campaña “mis hijos los crío yo”.  La asamblea del CPTSPR ha mostrado apoyo a esta propuesta aunque sigue siendo un tema de debate en la comunidad profesional.  Como segundo asunto abordaremos la búsqueda de prohibir las terapias de conversión. Desde la ONU se ha exhortado a cada país a prohibir las terapias de conversión.  En Puerto Rico se ha intentado prohibir estas “terapias''. Sin duda, ha sido un asunto de debate entre los sectores conservadores y las organizaciones de derechos humanos. Dentro del sector religioso encontramos a profesionales del Trabajo Social, quienes por sus creencias se oponen a la prohibición de estas prácticas.  Partiendo de esto, han generado campañas en las redes sociales y programas radiales y procesos judiciales para debilitar al CPTSPR. En tercera instancia reflexionamos en torno a la defensa de los derechos reproductivos de las mujeres y personas gestates, particularmente el aborto.  En Puerto Rico, por nuestra relación colonial con los Estados Unidos (EEUU), se aplica lo resuelto en el caso Roe vs. Wade en el año 1973.  Este reconoce el aborto como un derecho a la intimidad de las gestantes.   Sin embargo, apesar de ser legal, el aborto no es accesible en particular a mujeres empobrecidas.  Recientemente se ha propuesto una medida que propone restrigir el aborto a partir de la semana 22, independientemente del criterio médico.  Además, crea unos procesos que repercuten en intimidar a médicos y pacientes, afectando los servicios para la terminación de embarazos.  En la discusión legislativa se le ha negado turno al CPTSPR para deponer.Partiendo de estos asuntos reflexionaremos en los aportes del CPTSPR en la defensa de los derechos humanos de las mujeres y comunidad lgbttqia+ y cómo esto ha repercutido en ataques a la organización y la profesión.  Propuesta para la reflexión teórico-metodológicaPretendemos compartir a nivel de la región de América Latina y el Caribe nuestro análisis de los posicionamientos ético-políticos del CPTSPR a través de la revisión del contenido que generado para un currículo con perspectiva de género, la prohibición de las terapias de conversión y la reinvidicación de los derechos reproductivos de las mujeres, en particular el aborto y las reacciones del fundamentalismo cristiano. Siendo esto para:- ampliar las conversaciones con relación a cómo los sectores conservadores en Puerto Rico han ido radicalizando hacia un activismo político y buscando vulnerar derechos de las mujeres y comunidad lgbttqia+.- reflexionar sobre el accionar ético-político del CPTSPR y la reacción de los sectores fundamentalistas.- discutir las repercusiones que esto tiene para la organización de la formación y la práctica del Trabajo Social. Para esto, compartiremos los resultados de la recopilación de las posturas públicas y activismo asumido por el CPTSPR como: alianzas con otras organizaciones, participación en procesos legislativos o medios de comunicación,  reacciones del sector fundamentalista tanto en medios de difusión pública como programas radiales, redes sociales y procesos judiciales (demanda legal).  De esto, expondremos las implicaciones que esto tiene para la formación universitaria y continua, así como para la práctica profesional.  Referencias Céspedes (2019). Fundamentalismos religiosos, derechos y democracia. Coord. Coordinadora Mónica A. Maher.  Segunda parte.CPTSPR (2021). Memorial explicativo sobre el Proyecto del Senado 185.  Recuperado de: www.cptspr.org Comité PARE. Glosario. Recuperado de: https://parelaviolencia.pr.gov/glosario. ELA Tribunal de Primera Instancia Sala Superior de SJ (2021). Sentencia Declaratoria SJ2021CV05000.  Carlos Ramos; José Erazo; Nahir M. Bayona Hernández; y otros vs Departamento de Educación, por conducto Eliezer Ramos ELA, por conducto de su Secretario de Justicia, Honorable Domingo Emanuelli; y otros. ILGA World: Lucas Ramón Mendos, Poniéndole límites al engaño – Un estudio jurídico mundial sobre la regulación legal de las mal llamadas “terapias de conversión” (Ginebra: ILGA World, 2020)

Resumen:

La investigación lleva como título “Percepciones, conocimientos e imaginarios que justifican y toleran las diferentes formas de violencia de género, con incidencia en el acoso político, desde las mujeres altiplánicas de Puno”. Los Ejes de análisis fueron: Conocimiento sobre normas y políticas para la prevención, sanción y erradicación de la violencia contra la mujer; manejo de la información que tienen las mujeres sobre las rutas y protocolos de atención de la violencia y las percepciones socio culturales de las mujeres respecto a la justificación y tolerancia de la violencia con énfasis en el acoso político hacia las mujeres. La investigación se enmarca dentro de la perspectiva cualitativa. Las técnicas utilizadas fueron: Grupos focales de discusión y las entrevistas semi estructuradas. El estudio se realizó en tres provincias: Puno, Lampa y Azángaro.Dentro de los principales hallazgos se encuentran: el machismo es reconocido como una práctica cultural vigente en la vida cotidiana de las familias de la región Puno. Las redes familiares son el soporte requerido por las mujeres, pero además se encuentran las mujeres de sus propias organizaciones, que deben superar las rivalidades y envidias entre ellas. La solidaridad entre mujeres es señalada como un mecanismo para evitar ser acosadas políticamente. El acoso político se manifiesta desde el primer momento donde la mujer decide participar en la vida política de su comunidad. Se manifiesta con gestos, comportamientos, actitudes y hechos, donde la difamación personal y familiar es la principal arma para atacarla y hacerla desistir y obligarla a renunciar al cargo que viene ejerciendo. Las mujeres reconocen que tienen capacidades, conocimientos que les permitan resolver los problemas de la comunidad, para lo cual son fundamentales la persistencia, determinación, pero sobre todo anteponer las necesidades de la población a los intereses personales. La solidaridad entre mujeres se concretiza con la posición firme que tienen las mujeres para proteger a las víctimas de acoso político y evitar que sean sancionadas o que renuncien y decidan ya no participar en la vida política.

Resumen:

 O trabalho reprodutivo doméstico é conceituado enquanto atividade que na divisão social e sexual do trabalho se estabelece enquanto tarefa exclusiva e inata das mulheres na sociedade capitalista. Cabe às mulheres reproduzir biologicamente a força de trabalho e gerenciar as condições de sua reprodução social. Ainda que inseridas no mercado de trabalho, permanecem gerenciando de forma gratuita a organização do cotidiano, das crianças, idosos, homens .Na contramão desta perspectiva, ainda se configura, de forma insuficiente a articulação das políticas públicas e sociais com as reais demandas das mulheres, que a partir da análise do trabalho reprodutivo não pago das mulheres, vai se localizar, em sua totalidade, nas necessidades de todo núcleo familiar, incluindo  as de  acesso as políticas sociais. Neste sentido, a reprodução social, garantida a partir deste trabalho feminino, não possui uma rede setorial que viabilize, ou mesmo permita que estas mulheres organizem a vida familiar. Se conforma, portanto, enquanto mais um desafio para o cotidiano, sobretudo das trabalhadoras pobres. Localizamos que, dentre os fatores, tais como a precarização das condições e relações de trabalho no setor público, as contrarreformas, a apropriação privada do Fundo Público, o patrimonialismo e clientelismo, estas políticas não são construídas a partir da perspectiva do trabalho doméstico.  A proposta deste trabalho é, portanto, estabelecer as possíveis relações entre a conformação, execução das políticas sociais, e o trabalho doméstico não pago das mulheres. Consideramos que uma politica pública social acessada, em sua maioria, pelas mulheres, no sentido que cabe a estas este trabalho reprodutivo de gestão da vida familiar, prescinde de uma participação das mulheres na construção e avaliação destas mesmas políticas. Para realizarmos este desafio estabelecemos alguns marcos teóricos que fornecem elementos teóricos para o desenvolvimento do argumento. Neste sentido, estabelecer o diálogo com as produções que trazem o debate acerca da categoria reprodução social, sua articulação com os estudos feministas que tratam da temática do trabalho reprodutivo doméstico realizados pelas mulheres, e sobre as políticas públicas e sociais, em particular, aquelas que constituem a rede de Proteção Social  socioassistencial, se constitui enquanto tarefa essencial. No que se refere aos estudos feministas, a proposta é nos debruçarmos sobre aqueles que fazem a interlocução com o marxismo, no sentido de avançar na compreensão das relações e hierarquias que se estabelecem na relação entre homens e mulheres na totalidade do tecido social e na particularidade das relações familiares, cotidianas domésticas. Consideramos, pois que a divisão sexual do trabalho possui especificidade no modo de produção hegemônico, se configurando enquanto pilar essencial ao próprio capitalismo. Dentro desta proposta apresentaremos, em linhas gerais, a sistematização de duas perspectivas sobre o tema: Relações Sociais de Sexo e a Divisão Sexual do Trabalho, com ênfase nas construções do feminismo francês de Helena Hirata e Danielle Kergoat, e a retomada do debate empreendido pelo Feminismo autonomista de Ruptura, que não se restringiu a Europa, mas que se estendeu aos Estados Unidos, países do continente africano, australiano, com destaque para os estudos e militância do Coletivo Feminista Internacional (International Feminist Collective), que tinham como integrantes ativas Mariarosa Dalla Costa Selma James e Silvia Federici.Em relação as politicas públicas sociais, elencamos a Politica de Assistência Social, tendo em vista seu caráter capilar, no que se refere a intersetorialidade da Rede socioassistencial.  Em seguida, a proposta é realizar  uma breve contextualização das respostas à crise do capital desencadeada na década de 1970, em particular, as novas racionalidades nas formas de organização e prestação de serviços sociais expressas no setor público por meio das “contrarreformas” do Estado sob a orientação neoliberal. As políticas sociais dentro dessa conjuntura sofrem alterações significativas na medida em que na contramão das recentes conquistas e avanços que visam garantir práticas democráticas estas vão assumir o caráter mercantil produtivista. Adotam-se estratégias semelhantes de organização e gestão do trabalho àquelas do âmbito privado, que por meio das alterações legislativas viabilizam o surgimento de diversas modalidades de contratação. Com a Política de Assistência Social não foi diferente. Legitimada como política de direito através da Constituição Federal de 1988 (CF/88) compondo juntamente com a Previdência e a Saúde o tripé da Seguridade Social promove um novo ordenamento da Assistência Social. Dentro desta perspectiva, possui o controle social enquanto um de seus eixos estruturantes. É por meio da apreensão das estratégias de reação do capital à crise, que se torna possível compreender as tendências e fenômenos hoje presentes nas políticas sociais. Partimos da hipótese que compreender como se organiza a Política de Assistência Social nos possibilita realizar as mediações necessárias com o trabalho reprodutivo doméstico não pago das mulheres. Consideramos que inquietações que nos trouxeram até este tema são o resultado das experiências durante a trajetória acadêmica, profissional, da militância, mas sobretudo da necessidade de um objeto de estudo que trouxesse respostas para as mulheres que convivi durante toda minha vida: minhas tias, minha avó, minha mãe. As mulheres que sempre organizaram a dinâmica da vida cotidiana e que dedicaram suas vidas a família, ao marido, aos filhos, aos pais idosos e que abandonaram seus próprios desejos, projetos por este “trabalho de amor”. Mulheres que acessam os equipamentos da assistência em busca de serviços que auxiliem nesta árdua tarefa. O encontro com o feminismo autonomista permitiu compreender a reprodução social enquanto categoria, mas para além de perspectivas que dão voz as mulheres mais jovens (o que é legitimo) um feminismo que conversa com as mães. Um feminismo que se organiza e reivindica melhores condições de vida, saúde para a classe trabalhadora, tendo por base a concretude do cotidiano: a luta pelos serviços sociais, pela segurança alimentar, contra o racismo, a luta pelos direitos das crianças adolescentes, pela terra. A revolução será feminista, ou não será. Mas precisamos ter saúde mental para esta grande tarefa. Esperamos que este trabalho possa contribuir para a construção deste horizonte.