Resumen:

La adaptación de la educación superior a los contextos de la pandemia del COVID-19 y las medidas sanitarias ligadas, ha obligado a la forzada introducción de procesos de educación online y/o virtual; donde no ha quedado excluida la formación investigativa, entendiendo como la misma el proceso que facilita el conocimiento, el desarrollo de habilidades y capacidades para la aplicación y ejecución de la investigación.Por ello se lleva adelante un estudio que busca comprender las principales transformaciones en la formación investigativa en la carrera de trabajo social en la Universidad de las Américas, desde su modelo educativo basado en objetivos de aprendizaje presente en los diversos niveles de la formación investigativa. Así mismo el propósito será reconocer los desafíos y estrategias que han tenido los docentes frente a este proceso de formación investigativa online, así como las percepciones de los estudiantes en cuanto a sus procesos de formación.

Resumen:

Durante el año 2018 se consolidó la innovación curricular de la carrera, la que implicó una revisión del sentido y significado de la intervención social (Gonzalez-Saibene, 1996, 2015; Muñoz, 2011; Carballeda, 2002, 2010; Cortés, 2018, 2019) y las perspectivas que sustentaban la formación de las y los estudiantes. En ese contexto, se tomó distancia de cualquier perspectiva que contemplara la fragmentación de lo social. Ello implicó, soportar la formación desde perspectivas críticas que permitan articular, re-ensamblar (Latour, 1995, 2001, en Cortés, 2019) los elementos heterogéneos, superando dualismos y fragmentaciones.  Lo social es definido por los actores y no exclusivamente por los analistas, asignándole un cierto sentido de orden en el cual se pueden rastrear las relaciones entre las contradicciones y controversias. Por ello, consideramos al Actor–Red cuya actividad consiste en re- ensamblar los objetos de Intervención que son heterogéneos para el Trabajo Social en una red que sea capaz de redefinir y transformar, más que seguir reproduciendo una visión tradicional o clásica de lo que es el objeto profesional. En otras palabras, “es posible pensar en alternativas, reasumiendo una relación contradictoria de teoría y praxis en el horizonte de una comprensión social compleja, de una intervención social fundada en otros parámetros” (Matus, 2005, p.14). Esto conlleva problematizar ese orden bajo perspectivas clásicas, y repensar en la práctica-teórica la formación en Trabajo Social desde el eje de intervención social como articulador de territorialidades (Lefebvre, 1976, 1978, 1980; Harvey 2000, 2007; Butler, 2017; Salazar, 2014; Deleuze,2005; Foucault, 1984; Cortés, 2018, 2019), deconstructiva y decolonialmente situado.  Nos centraremos en el curso de Práctica de Intervención Social I, asignatura integradora, que corresponde a la primera experiencia formativa del o la estudiante de trabajo social y que se presenta como un espacio en el cual se integran los saberes adquiridos en la formación curricular previa, configurando una Intervención Social Situada a nivel local, con marcos referenciales acordes a las perspectivas y a los contextos en las cuales se encuentren desarrollando su práctica. En términos de modalidad, esta práctica se desarrolla en un trabajo directo en territorios y con actorías de base[1].  En este proceso, tanto estudiantes como docentes se instalan en los territorios y trabajan colaborativamente con las organizaciones, dirigentes y comunidad en general durante un semestre académico. Producto de la pandemia, durante los años 2020 y 2021 las clases presenciales en todas las instancias educativas debieron adecuarse a la modalidad virtual y remota.  Lo que llevó a la carrera a gestionar nuevas estrategias de vinculación con los diversos actores sociales involucrados en los procesos de intervención, transformándose la pandemia en una oportunidad para comprender de manera mucho más profunda el componente social, recuperar prácticas colectivas, configurar nuevas formas de hacer, entre otros (Carballeda, 2020). Este estudio buscó, analizar los significados y experiencias de estudiantes y agentes claves de los territorios (dirigentes sociales de comités de vivienda) en los que se realizó la experiencia de práctica de la carrera de Trabajo Social UNAB, sede viña del Mar, en el contexto pandemia durante los años 2020 – 2021. Giró en torno a 3 ejes fundantes que se articulan mutuamente a fin de recuperar y analizar la experiencia y generar conocimientos y saberes sobre ella: Desafíos, dificultades y tensiones de la práctica virtualizada.Desarrollo de procesos de intervención innovadores.Aprendizajes.  Se buscó relevar el rol de los participantes imbricados en la experiencia de intervención, permitiendo, mediante espacios dirigidos, reflexionar en relación con sus propias prácticas, generando conocimiento y saberes desde ellas. Para tal efecto, se utiliza la perspectiva fenomenológica (Husserl, 1998; Fuster, 2019), que, por su carácter interpretativo, facilita los procesos de reflexión y comprensión asociados a la experiencia vivida, relevando la significación y apropiación sobre las prácticas de intervención social de los y las estudiantes que cursaron la asignatura de Práctica de Intervención Social I, así como de los agentes claves involucrados. El enfoque metodológico utilizado fue de tipo cualitativo (Valles, 1999; Flick,2012), tendiente en un primer momento facilitar la recuperación y estructuración de la experiencia vivida, para en un segundo momento desarrollar un análisis de ella. Se realizaron entrevistas en profundidad (Delgado y Gutiérrez, 1999; Taylor y Bogdan, 1994; Gil, 2002) a los agentes clave y grupos focales (Valles, M. 1999; Petracci y Kornblit, 2004) con las y los estudiantes. Para el análisis documental (Valles, M. 1999; Andreu, 2003; Castillo, 2005), se consideró aquellos documentos centrales que orientan y dan cuenta del proceso de intervención, así como los producidos por las y los estudiantes en el contexto de práctica. En tanto, materiales informativos, documentos académicos, productos audiovisuales, entre otros.  Finalmente, en cuanto a los principales hallazgos podemos destacar, que lo aspectos relativos a la satisfacción de necesidades básicas, la asistencia (y su reconfiguración), la democratización de la información respecto a beneficios y ayudas del Estado fueron los ámbitos principales que se trabajaron en pandemia. Para ello, equipos de trabajo de estudiantes tuvieron que desplegar estrategias comunicacionales, vinculadas a tecnologías, uso de aplicaciones, redes sociales, entre otras para poder establecer un trabajo colaborativo con los territorios e ir aportando en la satisfacción de estas necesidades. Y aún cuando el impulso de la creatividad, la cercanía generacional con las tecnologías de la información de parte de las y los estudiantes facilitó el proceso, la reproducción de brechas de desigualdad social, también en lo digital, dificultaron algunos aspectos en la relación estudiante-docente-comunidad.  La combinación de actividades virtuales y presenciales, hacia el segundo año de pandemia, complementaron un trabajo donde si bien el flujo de información e instantaneidad aportaron al proceso, también relevaron la importancia e irremplazabilidad que tendría el estar en los espacios y realizar un trabajo directo con los sujetos desde miradas críticas de intervención social. Lo que evidentemente aporta a replantearnos las nociones sobre intervención social y el cómo esta responde a complejidades sociales emergentes.  [1] En Viña del Mar se ha trabajo principalmente con campamentos y sus comités de vivienda. La región de Valparaíso presenta el mayor número de campamentos del país, en tanto expresión de la informalidad urbana. 

Resumen:

O presente artigo tem como objetivo realizar um estudo bibliográfico sobre as condições e os desafios de acesso e de permanência do/a jovem das classes populares urbanas ao ensino superior público, a fim de identificar as políticas educacionais, em articulação com as políticas públicas e com os movimentos sociais na garantia da permanência estudantil enquanto direito do/a cidadão e dever do Estado. Os estudos teórico-metodológico propostos serão realizados a partir do aporte teórico de autores/as que possuem um referencial crítico-dialético em suas fundamentações teóricas, dentre eles/as, (BEHRING, 2020), (LIMA, 2020),  (FREIRE, 1996) e (FERNANDES, 1985), de modo a refletir os impactos da crise econômica, política, social, ambiental e sanitária, acentuadas pelo novo coronavírus (Covid-19) sob as condições de vida dos/as jovens e de seus familiares das classes populares urbanas, haja vista os desafios impostos pela pandemia no acesso e na permanência à educação superior pública. A primeira parte deste estudo propõe refletir acerca dos principais ataques provocados pela ofensiva ultraneoliberal no âmbito da Educação Superior brasileira, de modo a identificar as principais transformações sócio-históricas da responsabilidade pública do Estado na garantia de políticas sociais e, especialmente as políticas de Educação Superior públicas, além de refletir sobre a gênese, a estrutura, as reformas, os avanços e os retrocessos no processo de construção das instituições de ensino superior no Brasil por meio da análise histórica sobre as principais tendências econômico-teóricas e a articulação dos movimentos estudantis que configuraram as políticas sociais do país e de toda América Latina. Tendo em vista as influências da hegemonia neoliberal, inaugura-se um processo de individualização da vida social que passa a ser compreendida com um problema isolado, acompanhada pela segmentação, despolitização e refilantropização da questão social, além da implantação de políticas sociais setoriais incapazes de construir um projeto de Educação Superior fundado em valores universais, democráticos e emancipatórios. Somadas a essas determinações contraditórias, nos deparamos com um profundo quadro de recessão que provoca fortes impactos e consequências no mundo do trabalho e, de forma mais expressiva, sob as condições de vida de discentes trabalhadores/as, sendo os mais visíveis a precarização das relações de trabalho, a geração de insegurança e de instabilidade econômica e política, cujas contradições tornam invisíveis o caráter exploratório do trabalho por meio dos mecanismos de consenso e de adesão ideológica, além das dificuldades para conciliar o trabalho com o tripé da universidade (Ensino, Pesquisa e Extensão). A segunda parte do estudo apresenta um panorama acerca dos principais impactos provocados pela pandemia do novo coronavírus (Covid-19), que expõe radicalmente como o sistema capitalista global responde às suas crises sistêmicas desde a década de 1970 do século XX, e que afetam diretamente as condições de vida dos/as discentes por meio da suspensão das aulas presenciais e à adesão ao ensino remoto, das dificuldades de acompanhar as aulas pela internet devido a falta de acesso a recursos tecnológicos, além de inexistirem espaços adequados em suas residências para prosseguirem com os estudos. Além disso, é possível identificar em curso os sucessivos retrocessos acentuados pelo (des) governo de Jair Messias Bolsonaro (2019 – 2022) no campo da educação, uma vez que o Ministério da Educação (MEC) tem sido marcado por várias entradas e saídas de ministros no seu comando ante a um contexto complexo que exige respostas imediatas para que os/as estudantes não sejam mais prejudicados/as em seus estudos, principalmente, os/as que realizarão o Exame Nacional do Ensino Médio (ENEM) e irão prestar vestibulares para ingressar ao ensino superior. Por outro lado, também identificamos em curso vários projetos apresentados pelo Banco Mundial para a educação na América Latina, como por exemplo, o Future-se, o REUNI Digital (RD), além das (contra) reformas administrativas a favor da mercantilização financeira e da construção do projeto de universidade do grande capital. Tais projetos em curso contribuem para a sua expansão com a contenção de recursos, sem excluir o caráter fragmentado, multifacetado e privatizado da Educação Superior, influenciada por instrumentos de controle estatal e mercantil que asseguram a reprodução mundial do sistema capitalista. Nesse sentido, nos deparamos com um fator indispensável para as análises subsequentes: embora o novo coronavírus seja democrático, uma vez que toda a população se encontra sujeita a sua contaminação, este não atinge democraticamente todas as pessoas e tampouco produz os mesmos efeitos e riscos sociais às populações em condições de igualdade quando analisadas as suas particularidades. Logo, ao elucidar os desafios enfrentados para a garantia da permanência estudantil, também torna-se imprenscindível realizar a intersecção existente entre as categorias classe social, raça/etnia, gênero e sexualidade, exemplificadas por questões decorrentes das práticas de racismo, machismo, LGBTQIAPfobia, além de outras expressões de preconceito e de discriminação que se fazem presentes nos espaços da educação e que refletem diretamente nas condições de acesso e permanência à Educação Superior pública. Ademais, nos deparamos com uma longa jornada de luta e de resistência contra a ofensiva ultraneoliberal. É preciso caminhar reafirmando nossas forças políticas pela construção de uma universidade popular, universal e democrática, fundada em valores revolucionários que se opõem às determinações contraditórias da ideologia neoconservadora e de seu poder de persuasão. Conforme afirmado por Florestan Fernandes (1994), “que o futuro nos traga dias melhores e a capacidade de construir a universidade que está em nossos corações, nas nossas mentes e nas nossas necessidades”.

Resumen:

O presente artigo abordará algumas incipientes reflexões acerca do trabalho mediado pelas Tecnologias da Informação e Comunicação (TIC's) no contexto da pandemia da Covid-19 e, nele, especialmente em como tem se desenvolvido o trabalho docente diante de sua necessidade de adequação ao ensino remoto. Desse modo, visa atentar, particularmente, para os impactos do ensino remoto sobre o trabalho docente na realidade brasileira e da Universidade Pública, ponderando brevemente questões relativas também às especificidades do ensino de graduação em Serviço Social. Nesse sentido, entende-se que a incorporação das TIC’s no trabalho docente é imbuída de contradições que escamoteiam determinadas direções sociopolíticas, e o que aparenta ser um simples manuseio de novas ferramentas tecnológicas, aponta para o reforço à adesão a projetos de formação profissional que aprofundam a mercantilização e a privatização da Política de Educação, que vão de encontro aos interesses das classes trabalhadoras. Destaca-se que, nesse contexto em que se tornou comum o teletrabalho ou o trabalho remoto, mediado pelas TIC's, as tendências de aprofundamento da precarização do trabalho, via aumento da jornada e intensificação do trabalho, da ausência ou insuficiência de meios e condições de trabalho, e do obliteramento da participação política no ensino remoto tomaram feições ainda mais perversas, ante aos retrocessos que de um modo geral à classe trabalhadora tem sofrido no desenrolar da pandemia.