La ponencia busca exponer parte de los resultados de la investigación de maestría en Servicio Social desarrollada en la Universidad Federal de Río de Janeiro, titulada: La experiencia de la Asociación de Trabajadores Independientes - ATI: Trabajo, precarización y proceso de conciencia en el capitalismo contemporáneo en Colombia. En la cual se buscó analizar el proceso de conciencia de los trabajadores y trabajadoras pertenecientes a dicha organización sindical, como experiencia organizativa del llamado trabajo “independiente” en las particularidades del capitalismo contemporáneo en Colombia. El análisis de esta experiencia sindical fue de interés debido a que asocia a una diversidad de trabajadores y trabajadoras “independientes” o “autónomos”, tanto de lo que se denomina economía “formal” como de la economía “informal”; agrupando a un conjunto de trabajadores que generalmente no eran sindicalizados en Colombia. Esto, debido a que no son reconocidos como trabajadores bajo el código sustantivo del trabajo, adoptado por el decreto ley 2363 de 1950 que regula las relaciones laborales en el país y que garantiza los derechos de las y los trabajadores.Dentro del conjunto de afiliados están los trabajadores independientes o autónomos; denominados como contratistas independientes, los cuales desarrollan determinada actividad; ya sea en la ejecución de una obra o en la prestación de servicios para otra persona o entidad contratante por un precio determinado bajo una relación de orden civil o comercial. Otros de los “independientes” que están dentro de la denominada “economía informal” son los vendedores ambulantes estacionarios y semi-estacionarios; comercializando mercancías o produciendo bienes como alimentos o artesanías. La forma en que se establece la relación de trabajo de estas personas, hace que se les considere a los primeros como “contratistas independientes” y a los segundos como “emprendedores” dueños de pequeños negocios, escondiendo bajo estas denominaciones su condición como trabajadores.En el desarrollo de esta ponencia se busca explicar que lo conocido como “informales” “independientes” o “autónomos” son segmentos de la clase trabajadora, que pueden constituir la superpoblación relativa como trabajadores en potencia, o, ser trabajadores que tienen encubierta su relación de asalariamiento, haciendo parte del ejército laboral activo, ambos teniendo condiciones de trabajo y de existencia precarias, propias del proceso de reestructuración productiva y las reconfiguraciones en el proceso de organización y gestión de la fuerza de trabajo que se vienen implementando desde la década del setenta del siglo XX hasta la actualidad.Por lo anterior en la investigación se retomaron tres categorías centrales: trabajo, precarización y conciencia de clase; analizando el sistema de mediaciones que intervienen en el proceso de conciencia de las y los trabajadores que hacen parte de la ATI, fundamentándose en la dialéctica y el materialismo como sustento filosófico y método de investigación. En el proceso de investigación se utilizaron como técnicas de recolección de información, el análisis documental, la entrevista semi-estructurada y la encuesta. Por lo anterior se buscaron fuentes que brindaran datos cuantitativos para radiografiar el fenómeno, y a su vez, documentos de análisis teórico referentes al tema. Adicionalmente se realizaron 12 entrevistas enfocadas en la historia de vida de los trabajadores y trabajadoras pertenecientes a la experiencia organizativa de la ATI y un grupo focal con la junta directiva del sindicato, con el objetivo de identificar cómo las relaciones sociales en condiciones concretas de existencia desenvuelven ciertas formas de conciencia. Finalmente se buscó recolectar información sobre las condiciones socioeconómicas y laborales de los afiliados en Bogotá y Cúcuta, ciudades de Colombia donde la ATI ha desarrollado trabajo sindical y en donde se brindaron las fichas de afiliación de 154 asociados para su sistematización. Se tomó como muestra la tercera parte del número total de afiliados debido a la movilidad que tienen por los tipos de trabajo que desarrollan, censando un total de 42 afiliados, con la finalidad de hacer una caracterización más profunda.La ponencia se estructura en tres partes: el primero describe el fenómeno a partir de las cifras institucionales de orden internacional y nacional, analizando cómo el “trabajo informal” y el “trabajo independiente” se presenta de manera aparente en la realidad contemporánea neoliberal. El segundo busca evidenciar cómo el “trabajo informal” es un fenómeno que existe con el desarrollo de la composición orgánica del capital, que desde el siglo XIX empieza a evidenciarse, encubriendo con este término la constitución de una superpoblación relativa, que en la contemporaneidad se agudiza, analizando las particularidades del caso colombiano como sustento en el que se argumenta que estos segmentos son parte de la clase trabajadora, y por tanto, que la lucha de clases es vigente. Finalmente se analiza el sistema de mediaciones que intervienen en el proceso de formación de conciencia de las y los trabajadores colombianos vinculados a la Asociación de Trabajadores Independientes- ATI identificando la relación subjetiva y objetiva que constituye la realidad contemporánea en la que se desarrolla la organización de los trabajadores en las dinámicas de precarización y desmonte de los derechos laborales.
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Mobilidade da força de trabalho e dependência: uma breve abordagem de suas tendências e legalidades
Hugo Cordeiro Mota Pinheiro1
1 - Pontifícia Universidade Católica do Rio de Janeiro (PUC-Rio).
Este artigo tem como objetivo desenvolver uma discussão sobre a mobilidade da força de trabalho nas formações econômico-sociais dependentes. Neste caso, a fim de apreender as tendências e as legalidades da mobilidade de trabalhadoras e trabalhadores no capitalismo dependente, levamos em consideração as particularidades dos Estados dependentes , bem como o papel que desempenham na Divisão Internacional do Trabalho e, por conseguinte, no processo de mundialização do capital em sua totalidade.
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Particularidades e tendência de organização do trabalho coletivo nas políticas públicas no âmbito do Estado
O presente artigo tem por objetivo compreender o processo de transformação do trabalho na esfera pública a partir das disputas em torno do fundo público, mais especificamente do Orçamento Bruto de Pessoal (OBP). Trate-se de uma revisão bibliográfica sobre o trabalho, articulada à pesquisa documental sobre o orçamento público e as contrarreformas de caráter administrativo.Vivemos um período de crise estrutural e permanente do capitalismo, uma crise em escala mundial expressa no aumento do desemprego, na corrida tecnológica, nas incessantes contrarreformas, na precarização do trabalho, na hegemonia do capital financeiro. Nesse contexto, temos um acirramento das disputas em torno do fundo público, onde o capital busca se apropriar de parcelas cada vez maiores dos recursos públicos revertido na forma de serviços para os trabalhadores. Chamamos a fatia do Orçamento que paga os servidores públicos de Orçamento Bruto de Pessoal (OBP). Ele é composto em dois grandes eixos, um relativo aos servidores da ativa e outro relativo aos servidores aposentados e pensionistas. No ano de 2020 o OBP da União foi previsto em 337 bilhões de reais. Esse valor paga servidores da ativa, pensionistas e aposentados dos poderes executivo, legislativo e judiciário, bem como o serviço militar.Ora, o total de gastos da união ao contrário do que a mídia apresenta, não é apenas um gasto com salários dos servidores da saúde, educação, previdência. Da mesma forma, a sua dupla divisão vincula o orçamento a dois conjuntos de direitos: os trabalhistas (que incidem nos salários e vantagens) e os previdenciários (que incidem sobre aposentados e pensionista). As contrarreformas que visam reduzir os gastos com servidores são, em nossa compreensão, de natureza trabalhista e envolvem tanto a esfera administrativa, quanto a previdenciária. Não atoa temos vivido uma permanente contrarreforma nestas duas áreas, sob a falsa alegação de que o Estado Brasileiro gasta demais com servidores. Desde a década de 1990 está em curso um permanente ataque aos gastos com os servidores. Temos, a título de exemplo, no âmbito administrativo, de acordo com Pereira (2020[1]) um conjunto de leis que ampliam: As terceirizações operacionalizadas por meio da Lei nº 8.666/93 e dos Decreto nº 2.271/1997 e 9.507/2018. De acordo com os dados da Pesquisa Nacional de Amostra por Domicílio Continua (2019) sistematizados por Carvalho (2020)[2], temos, entre os anos de 2012 e 2019, um crescimento dos trabalhadores informais de nível superior em 10,63% e uma diminuição do funcionalismo público no mesmo nível de escolaridade em 1,02 %;Congelamento e ampliação das dificuldades para realização de concursos públicos, que se expressam no Decreto nº 9.739/19, na Lei Complementar n° 173/2020 e, mais recentemente, na aprovação da Proposta Ementa Constitucional 186 que criou gatilhos para congelamento de gastos essenciais que impedem, dentre outas coisas, os aumentos salariais e a realização de concursos para novas vagas;Este cenário adverso elucida a não recomposição dos quadros profissionais no âmbito das políticas sociais. Esse enxugamento vem sendo realizado através da inserção de tecnologias da informação, responsabilização dos trabalhadores por sua produtividade e técnicas de gestão e controle gerenciais da força de trabalho. O que se observa é uma degradação do trabalho na esfera pública e uma profunda intensificação das jornadas de trabalho.No plano previdenciário observamos: A lei 12.618/2012 que acabou com a aposentadoria integral para servidores admitidos após 05 de fevereiro de 2013 instituindo a Previdência Complementar. A partir de 2043 a geração que entrou no serviço público após fevereiro de 2013 irá se aposentar, e, com isso, teremos uma redução brutal do valor do OP;A EC 103/2019 que aumentou o tempo de contribuição e alíquota previdenciária do funcionalismo, que pode chegar até 22% do salário. Além disso, tivemos a privatização do fundo da Previdência Complementar.O contexto de aprofundamento da crise capitalista vem promovendo uma permanente contrarreforma administrativa e previdenciária. Esse processo é operacionalizado por meio da expropriação de direitos que aprofundam a precarização do trabalho como condição de punção da fatia orçamentária que paga os servidores públicos. Esse fenômeno, como podemos ver, não se trata de mero “juridiquez”, ele altera objetivamente o trabalho no interior das políticas sociais. Neste sentido, temos um incremento dos vínculos terceirizados, temporários, contratados por CLT e vinculados a Organizações Sociais. A multiplicidade de vínculos impulsiona a fragmentação da organização político-sindical dos servidores e incidem, também, na autonomia profissional. Quanto mais frágil são as formas de contratação, mais suscetíveis a pressões políticas. Esse processo fragiliza a atuação dos servidores na perspectiva da garantia dos direitos de cidadania, ficando subjugado aos imperativos dos gestores. Da mesma forma, a mudança não é só nas formas de contratação, ela incide sobre o processo de trabalho. Observamos um incremento das tecnologias da informação no processo de trabalho coletivo nas políticas públicas, uma tendência de aumento de produtividade para suprir as aposentaria dos servidores, levando os trabalhadores a exaustão. Destacamos o teletrabalho, mesmo antes da pandemia, como uma tendência para trabalho na esfera pública. Os servidores são responsáveis pelos meios de trabalho, perdem os auxílios transporte e, por desfrutar dessa “benesse”, muitas das vezes precisam aumentar as metas já presente no trabalho presencial. Neste sentido, a atual contrarreforma administrativa em tramitação no congresso (PEC 32) aprofunda o ataque trabalhista aos servidores, propondo, dentre outras coisas, a possibilidade de privatização das políticas sociais por meio de sua operacionalização por grandes corporações, bem como o fim da estabilidade par aos servidores. Esse processo tem um amplo caráter destrutivo para o trabalho coletivo na esfera pública, ameaçando a natureza pública das políticas operacionalizadas no Estado e instaurando a lógica do valor na esfera historicamente improdutiva. Defender o funcionalismo, nessa conjuntura, é defender o conjunto de trabalhadores que dependem das políticas públicas para se reproduzir. [1] PEREIRA, G.O. Fundo público e precarização do trabalho: as disputas em torno do orçamento bruto de pessoal. In: Mauriel, A.P.O.E.et al. Crise, ultraneoliberalismo e destruição de direitos. Uberlândia: Navegando, 2020[2] CARVALHO, S.S. Qualificando o debate sobre os diferenciais de remuneração entre os servidores públicos e privados no Brasil. Cadernos da Reforma Administrativa. Brasília: 2020