Resumen:
En el presente trabajo propongo compartir algunas reflexiones que vengo construyendo desde la investigación doctoral vinculadas a experiencias de intervención del Trabajo Social que se despliegan en el marco de los programas de inclusión social argentinos, dirigidos a jóvenes que residen en dispositivos de cuidado institucional a partir de la disposición de medidas de protección de derechos. Particularmente en esta ocasión, anhelo poner en común algunos interrogantes en torno a cómo se habitan estas intervenciones en el marco de los acompañamientos institucionales que las políticas de protección proponen y en particular indagar en la dimensión afectiva en clave política.Desde un modo situado de pensar la profesión, comprendo a la intervención de trabajo social como campo problemático (Rozas Pagaza, 2010) y como una trama enlazada donde se tejen las ideas en torno a los sujetos, los cuerpos, los afectos y los derechos como hilos que conforman el Trabajo Social contemporáneo (Ageitos et al, 2021). A su vez, considero la metáfora del habitar como una experiencia integral y una cartografía posible para pensar la intervención como modos de crear y de producir desde el cuidado (Hermida, 2018), en una inquietud por revisitar las experiencias cotidianas profesionales situadas desde la contradicción entre el disciplinamiento y la transformación social. Retomo desde ahí la idea del habitar que se inaugura reconociendo y nominando nuestra experiencia corporal, por cuanto la intervención no se nos presenta como exterior sino corporizada: la habitamos sudorosa (Ahmed, 2021) e incómodamente (Danel, 2020).Ello nos remite a las ideas centrales del giro afectivo, que irrumpen en las ciencias sociales durante la última década del siglo pasado y es entendido como “la creciente atención a las emociones como fuente privilegiada de verdad sobre el sujeto” (Arfuch: 2016, 248). Desde el giro afectivo, “las emociones no son estados psicológicos, sino prácticas sociales y culturales; no suponen una auto-expresión que se vuelca hacia afuera (in/out: de adentro del sujeto hacia fuera, la sociedad), sino más bien se asumen desde el cuerpo social (outside/in: de afuera para adentro), en tanto son las que brindan cohesión a este cuerpo social” (Ahmed en Cordineanu, 2019:103). En este sentido, el desafío que se presenta para las ciencias sociales es desarrollar una metodología que permita capturar la dimensión afectiva como vinculada a los procesos sociales, desde su rol performativo y productor de conocimientos. La investigación en curso es de tipo cualitativa (Archenti, et.al, 2007) conjugando distintas estrategias, entre las que se destacan entrevistas individuales y grupales a trabajadoras/es sociales que se desempeñan o se han desempeñado profesionalmente en programas y dispositivos del Sistema de Protección Integral -instituciones de cuidados alternativos, Servicios Locales y Zonales, programas de acompañamiento para el egreso-. Particularmente el énfasis está puesto en las experiencias profesionales vinculadas a trayectorias juveniles colocadas en la vida cotidiana. Pensando que el acompañamiento de trayectorias constituyen formas de construir habitares, desde la generación de esas narrativas, me detendré en la producción de afectos que se traman en esta idea del acompañamiento, por cuanto para el Trabajo Social se presenta en el problema de estudio, como un mandato programático a su vez que se configura como una dimensión estructurante de la intervención (Danel, 2020) y una categoría teórica pujante a desentrañar (Sierra, 2021). Porque al asumir la demanda/tarea de acompañar el Trabajo Social es testigo del impacto de una singular trama de desigualdades en las trayectorias vitales de jóvenes, que vienen signadas por la precariedad y la incertidumbre en torno a un futuro posterior a su salida del Sistema de Protección Integral. En investigaciones anteriores advertimos que estos procesos son abruptos e intempestivos (Favero Avico, 2019) por cuanto todo el andamiaje protectorio estatal se desvanece rápidamente ante el cumplimiento de la mayoría de edad o el incumplimiento de requerimientos y condicionamientos propios de los programas estatales en torno a los procesos de egreso; en donde esos mismos cuerpos que pretendieron ser cuidados, son ahora desvalorados, culpabilizados y desechados.Entonces sobrevienen las preguntas en torno a los afectos que se producen y circulan en los acompañamientos, los modos de habitarlos y los procesos que habilitan y cercenan. En este aspecto, los aportes del giro afectivo fundamentalmente desde la influencia de los feminismos críticos (Macon, 2021, Solana y Vacarezza, 2020) invitan a la pregunta sobre la afectividad y las emociones puestas en acto, reponiendo la inquietud acerca de los modos por los que circulan los discursos sobre ciertos afectos histórico-políticos como la felicidad (Ahmed, 2019), el optimismo cruel (Berlant, 2011) y el entusiasmo (Svampa, Losiggio y Abadi, 2020) en nuestros territorios; y en torno a cómo impactan estas dimensiones de la intervención en la promoción y cancelación de autonomías, por cuanto el Trabajo Social participa en un espacio privilegiado en el encuentro con les jóvenes, desde las proximidades a su vida cotidiana, a sus afectos e historias, pero también a las trayectorias que los lleva a la pobreza, a la vulnerabilidad y a los procesos de desafiliación que impactan en el debilitamiento de los lazos sociales. ¿Cómo se despliegan estas experiencias afectivizadas en nuestras intervenciones? ¿En qué medida los entusiasmos por el progreso, por una vida “adulta e independiente” y “feliz” propios de nuestros discursos obturan otras emociones otras en las escenas interventivas? ¿Cómo registramos los padecimientos? ¿Hasta qué punto la distancia emocional como encuadre de nuestras intervenciones no se convierte en una jaula de hierro weberiana? Hilar estas preguntas desde la dimensión afectiva habilita observar cómo se habitan las intervenciones y se ponen en escena los cuerpos, cómo operan los enunciados y los procesos vinculados a la conmoción frente al sufrimiento social, de las situaciones de opresión de las que el Trabajo Social es testigo y las disputas de sentido que sostiene. En este sentido, considero que el reconocimiento de las huellas afectivas en las tramas entre intervenciones, trayectorias juveniles y políticas de protección y cuidado, requiere de una pregunta política para hacer transparentes sus fundamentos, tensionarlos y habitar formas otras de construcción de lo común. Referencias bibliográficas● Ageitos P, Calvo M, Danel P, Favero Avico A, Lopez S, Santana Quintero A y Velurtas M (2021): De urdimbres y tramas en las reflexiones y apuestas del Trabajo Social contemporáneo. En: Danel P. y Velurtas M (comp) Entre precariedades y derechos: anudando debates del Trabajo Social, las políticas sociales y la intervención. Libros de cátedra. EDULP. http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/120938● Ahmed, S (2021): Vivir una vida feminista. Buenos Aires. Caja Negra Editora.● Ahmed, S (2019): La promesa de la felicidad. Buenos Aires. Caja Negra Editora.● Arfuch, L (2016). “El “giro afectivo”. Emociones, subjetividad y política”. En Emociones en la nueva esfera pública. Designis, 24, enero-junio: 245-254● Berlant, L. (2011). El optimismo cruel. Buenos Aires. Caja Negra Editora.● Corduneanu, V (2019) El regreso del sujeto: los desafíos epistemológicos y metodológicos de las emociones. En: Cornejo, I y Giebeler, C (coord.): Prójimos: prácticas de investigación desde la horizontalidad. Ciudad de México: UAM● Danel, P. (2020). Habitar la incomodidad desde las intervenciones del Trabajo Social. En: Revista Escenarios N. 31. FTS. UNLP.● Favero Avico, A (2019). “Los procesos de egreso de jóvenes en situación de institucionalización en la ciudad de La Plata. Una mirada desde el Trabajo Social”. Tesis de Maestría. Disponible en http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/81552● Hermida, M.E (2018) “Habitar las instituciones: notas para una intervención social -otra en contextos de colonialidad”. Trabajo presentado en las II Jornadas Internas “Las Colonialidades instituidas: procesos, relaciones, estrategias”. Universidad Nacional de Rosario, CONICET, Rosario, septiembre de 2018● Macon, C (2021) “Desafiar el sentir. Feminismos, historia y rebelión”. Buenos Aires, Omnivora Editora.● Rozas Pagaza, M (2010): “La intervención profesional un campo problemático tensionado por las transformaciones sociales, económicas y políticas de la sociedad contemporánea” O Social em Questão - Ano XIII - nº 24 - Jul-Dez 2010. Pp 43-53● Sierra, N. (2021). El acompañamiento como categoría y las instituciones contemporáneas. En: Revista “Debate Público. Reflexión de Trabajo Social”. Año 11- Nro. 21. http://trabajosocial.sociales.uba.ar/wp-content/uploads/sites/13/2021/08/20_Sierra.pdf● Solana, M. y Vacarezza, N. (2020). Sentimientos feministas. Revista Estudos Feministas, 28(2), 1-15.● Svampa, L, Losiggio D y Abadi F (2020) El entusiasmo como afecto histórico-político Revista Diferencia(s), N. 10, pp. 19-28